La Unió Socorristes de Calvià ha convocado para este domingo a las 8AM una manifestación en la playa Palmira de Peguera. El colectivo, que tiene previsto reunirse el jueves 25 de julio a las 9:30h en el TAMIB con la empresa adjudicataria para tratar de encontrar una solución pactada al conflicto laboral, anunció a finales de junio su intención de convocar seis días de huelga en las playas del municipio los dos últimos domingos de julio y los cuatro de agosto. En declaraciones a Radio Calvià, el colectivo de socorristas de Calvià ha confirmado la suspensión de la jornada de huelga convocada para este domingo, 21 de julio, en vistas a que el Ajuntament de Calvià evalúe sus demandas.
La Unió Socorristes de Calvià sostiene que, “si bien, en una primera reunión con el Ayuntamiento, se mantuvo un buen diálogo y buena predisposición de ambas partes, a la hora de firmar los acuerdos, los compromisos no eran firmes”. En cuanto a la empresa concesionarios, Marsave SL, el colectivo de socorristas ha declarado que ésta no ha querido colaborar con ninguna mejora para los trabajadores. Tras la manifestación convocada para este domingo a las 8 AM en la playa Palmira, el equipo de socorristas de esta playa de Peguera ofrecerá el servicio con normalidad.
Desde hace meses, los socorristas de Calvià denuncian la precariedad del servicio que se ofrece en los arenales del municipio por, entre otros, falta de material y la dificultad de acceso para personas con movilidad reducida. No hay sillas de traslado ni anfibias en todas las playas, y muchas de las que hay no se encuentran en condiciones. Denuncian también la falta de pasarelas y puestos para personas con movilidad reducida (PMR); la prestación del servicio de salvamento descompaginado, con puestos de PMR y embarcaciones de apoyo que finalizan hora y media antes de terminar el mismo, o playas que dejarán de prestarlo en Septiembre.
La Unió Socorristes de Calvià también denuncia la suplantación del Socorrista por la figura del “Socorrista Reactivo”, al que se le permite y se le exige realizar otra actividad como por ejemplo cobrar hamacas. Funciones, señala el colectivo, que atentan directamente con las premisas del socorrismo acuático: VIGILAR, PREVENIR y SOCORRER.
Los socorristas también mencionan la precariedad en sus puestos de trabajo, por torres de vigilancia que no están en condiciones y que no son funcionales. Éstas, dicen, no frenan la radiación, el viento o la lluvia, atentando no solo contra la salud de los profesionales del salvamento sino también contra el estado del material de trabajo, que podría estropearse, como desfibriladores mojados en días de lluvia.
La agrupación de socorristas de Calvià también denuncia la falta de puestos de socorro y la falta de funcionalidad de los existentes, algunos en peligro de derrumbe, sin servicios indispensables para la atención sanitaria como el agua o el hielo, ni accesibilidad para personas con movilidad reducida. El colectivo también añade que el vehículo de intervención rápida (VIR) no tiene luces ni sirena, lo que hace imposible que éste llegue a tiempo a una emergencia en días de mucho tráfico. Los socorristas del municipio apuntan que todas estas deficiencias dan como resultado un servicio deficiente para personas residentes y turistas, accidentes evitables, y condiciones laborales indignas para los y las trabajadoras.